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Julio Guzmán: candidato en fuga

Publicado: 2020-01-20

La caída en desgracia de Julio Guzmán lo saca -con bastante anticipación- de la carrera electoral 2021. Su pobre capacidad para dar una respuesta articulada sobre su conducta solo ha servido para confirmar lo que las imágenes de “su escape” nos mostraron también ayer domingo: que el líder del Partido Morado no da la talla. 

Dicen que en la política nunca se puede dar a nadie por muerto, y es cierto. Pero si algo nos ha demostrado Julio Guzmán, es su poca habilidad política, su constante capacidad para contradecirse producto de su permanente voluntad por quedar bien con todo el mundo, sus respuestas y sus sonrisas prefabricadas. A todo ello ha terminado sumando su falta de temple frente a una situación de peligro en la que solo atinó a pensar en sí mismo y en nada más.

El escándalo ha generado diversas reacciones y los más originales memes; además de un llamativo silencio del Partido Morado. ¿Cuántas horas toma reaccionar ante semejante descalabro? Los hasta ayer entusiastas partidarios de Guzmán parecen haber agotado su capacidad de reacción luego del escándalo de Daniel Mora. Para decirlo en términos boxísticos, habían quedado groggys y ahora les están contando los segundos al borde del knock out.

¿Podrá el Partido Morado demostrar que antes que “morado” es un Partido? Para ello tendrían que dejar de perder más tiempo y exigirle a su líder la renuncia inmediata, no sólo al cargo de presidente del partido, sino a su condición de militante. Esa sería la única forma de demostrarle a la opinión pública y a sus simpatizantes que su existencia no está determinada únicamente por la voluntad de Guzmán de ser Presidente de la República. Lo contrario sería confirmar, lo que muchos sospechamos desde que incursionó en la política, que es un aventurero más de tantos que conocemos y que el Partido Morado no es un partido.


Escrito por

El Arriero

Javier Torres Seoane: Antropólogo de profesión y comunicador de oficio.


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Un blog de Javier Torres Seoane