El historiador Nils Jacobsen, profesor de la Universidad de Illinois, estuvo en Lima hace unas semanas participando en el seminario "Tiempo de Guerra: Conflicto armado y construcción del Estado-Nación siglos XVII-XIX". Jacobsen es autor de "Ilusiones de la transición: El altiplano peruano un libro fundamental para entender la historia de Puno 1780-1930" (IEP 2013) y además viene investigando hace varios años un momento clave de nuestra historia republicana: La guerra civil de 1894-1895 que enfrentó a Andrés Avelino Cáceres y a Nicólas de Piérola. 

En esta entrevista con El Arriero, Nils Jacobsen explica cómo esta guerra civil cierra un largo ciclo en el que los gobiernos podían ser derrotados por montoneros, a diferencia de etapas posteriores. Por otro lado, explica que a pesar de que el ejército regular comenzaba a profesionalizarse, Piérola "logró convencer a los sectores medios que Cáceres era un tirano y que la vía para llegar a un sistema más democrático con elecciones efectivas sería por la victoria de la coalición".

Asimismo deja claro que "el proyecto de Piérola no incluyó a los indígenas", lo que se expresa en su eliminación como electores, a pesar de que hubo algunas montoneras indígenas "especialmente en la región de Huancavelica", y "en las provincias de Espinar y Chumbivilcas". Jacobsen considera que la coalición de Piérola sumó a diversos grupos que no necesariamente eran pierolistas y más bien que tenían "motivaciones particulares, de grupos, regionales, provinciales" sin dejar de reconocer la importancia del Partido Demócrata.

Según Jacobsen, "Piérola está pensando en llegar a las masas de una manera distinta de los civilistas...era un populista 'avant la letre'. Lo que él no podía saber es que el mismo proceso de involucrarse, de luchar, de sufrir en la guerra civil convenció a muchos jóvenes de seguir en la política, de entrar en movimientos civiles". 

Esto es lo que lo lleva a cuestionar la caracterización que hace el historiador Jorge Basadre, del período que se inicia con la derrota de Cáceres, como 'República Aristocrática', ya que estos jóvenes van a promover en las primeras décadas del siglo XX un activismo social que puso en agenda los derechos de diversos sectores de la población, poniendo en cuestión a los gobiernos de aquella época.