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andina

Y acá no pasa nada...o eso es lo que nos quieren hacer creer

Publicado: 2016-12-19

Finalmente se llevó a cabo la reunión entre el presidente Pedro Pablo Kuczynski y Keiko Fujimori. Como suele suceder en este tipo de casos: lo único que importa es la foto final. Y como podemos ver en la foto de Andina que acompaña esta nota, las forzadas sonrisas de ambos, y las inocuas declaraciones con frases hechas no auguran nada diferente a lo que venimos viendo en los últimos meses.

De un lado, la imagen de un presidente debilitado que tiene que verse sometido a acudir a una cita convocada por el Cardenal Cipriani -cuestionado personaje lejano de cualquier consenso- para dialogar con una candidata que, durante meses, no fue capaz de aceptar su derrota en las urnas. Del otro, una lideresa fortalecida luego de tumbarse al ministro de educación y que se siente segura de su respaldo popular: su descenso en las encuestas parece tener un límite en el cual se puede mover con comodidad (40% de aprobación)

¿Qué nos espera luego de la cita? Pareciera imposible que el fujimorismo pueda aceptar co-gobernar, si es que le interesa ganar las elecciones del 2021.Más bien pareciera que la estrategia será seguir consiguiendo posiciones al interior de instituciones claves del Estado, donde aparentemente la Procuraduría General es la próxima "colina" a tomar. A la par, va forzando al gobierno a ir deshaciéndose de sus aliados demoliberales, como ya lo logró con Saavedra.

Cogobernar le podría significar un alto costo político, mejor dejar que la imagen del Congreso, convertido en una suerte de "ejecutor" del trabajo sucio, se siga viniendo abajo. Total como bien sabe el fujimorismo, en el Perú hay poca reelección congresal, y la mayoría de sus 72 parlamentarios es probable que sean reemplazados por otros para el 2021. Pero además porque al asignarle el rol de "el malo" al Congreso, no solo arrastra a la impopularidad a los suyos, sino al conjunto de las bancadas, que tienen cero margen de juego.

Del lado del gobierno, la reunión -con rezo incluído- le sirve para tomar un breve respiro al que le seguirán otras reuniones ya anunciadas por el Premier Zavala. Pero no habrá reunión que sirva, mientras que al interior del gobierno no se terminen de asumir que (valga la redundancia) el presidente Kuczynski tiene una sola tarea: Gobernar. 

Si PPK no comienza a gobernar, es probable que no haya Cardenal que pueda contener los impetus fujimoristas ni rezo que valga, y ahí la siempre viable carta de la vacancia se mantendrá como una amenazante y filuda guillotina sobre nuestro desconcertado presidente.  

RPP



Escrito por

El Arriero

Javier Torres Seoane: Antropólogo de profesión y comunicador de oficio.


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Un blog de Javier Torres Seoane