Y como nos muestran las portadas de los principales diarios de la capital, se produjo el esperado diálogo entre el gobierno y las diversas -y dispersas-fuerzas políticas, con la anunciada ausencia de Alan García y Keiko Fujimori, los cuales según Mirko Lauer deberían sentarse a dialogar para llegar a "un acuerdo de no agresión 2016". 

Pero, volviendo a la mesa de Palacio, JJ Garrido analiza el anunció del cierre temporal de la DINI y considera que "esto no tranquilizará a nadie; por el contrario, lo que antes era auditable (por el Congreso o el Poder Judicial) hoy será de conocimiento exclusivo de la cúpula gubernamental". Mario Saldaña, por su parte considera "lo de ayer como un clamor de tregua de Ana Jara" y explica el fracaso de la primera ministra en su intento de convencer al Presidente Humala de la necesidad de cambios en el gabinete.

En el otro extremo, Rolando Breña Pantoja llama la atención sobre las fuerzas de izquierda que no fueron convocadas a Palacio como el "Frente Amplio o Tierra y Dignidad, debidamente inscrito en el ROP, y al MAS, no inscrito pero que conduce el Gobierno Regional de Cajamarca", y hace un agudo y crudo diagnóstico de algunos ¿partidos? presentes en el diálogo "agrupaciones viudas de organización, huérfanas de estructura, divorciadas del quehacer político y la ciudadanía, parapléjicas de liderazgo, sobrevivientes merced a alguna alianza electoral de conveniencia". Más sabe el diablo por viejo, que por diablo.

Y la lápida al dialogo palaciego la pone Hugo Guerra que "Treinta minutos de monólogo de una primera ministra cuya autoridad política es mínima, la reiterada visión soberbia de un presidente sin liderazgo y casi cuatro horas de intervenciones de políticos poco representativos". Y repite como un mantra hindú que todo ha sido una farsa. 

Lo cierto es que como bien señala Rosa María Palacios, al gobierno no le fue tan mal ya que ofreció "pocas cosas pero atractivas para fuerzas políticas minoritarias", con lo cual le funcionó el improvisado balón de oxígeno. Pero habrá que ver cuanto le dura.

MIRANDO EL 2016

Otros columnistas miran al 2016. Así Carlos Melendez analiza la última encuesta de Datum y concluye afirmando que "si la temperatura política está bajo cero, las expectativas sobre el advenimiento de un outsider se incrementan (69% cree que habrá uno). De no aparecer esta figura, los ‘antis’ –nuevamente– terminarán decidiendo la elección". En ese sentido, el consejo a quienes buscan una curul, como Carlos Bruce y Juan Sheput, es ubicarse al lado de aquel que genere menos anticuerpos. 

Fernando Vivas, revisa "las mochilas familiares de los candidatos". Un aspecto clave, si recordamos las anteriores campañas, y el rol de Nadine Heredia, Pilar Nores y Eliane Karp, además del caso Zaraí o los intringulis de la familia Humala. Luego de leer al crítico de tv, a uno le queda claro que PPK es el único que tiene ligera esa carga.

Nelson Manrique nos recuerda el habitual drama de la búsqueda de la unidad de la izquierda, cada vez que tiene que afrontar un proceso electoral, y plantea que "no hay renovación posible sin la renovación de los liderazgos, y esto debe tomar en cuenta la representación generacional, de género y de los demás grupos sociales marginados", y pone como ejemplos de estos nuevos liderazgos a Verónika Mendoza, Marisa Glave y Sigrid Bazán. ¿Le harán caso?

Para terminar Juan Carlos Tafur, entusiasmado por la última encuesta de CPI, en la que el presidente Humala sube a 28.7% su aprobación, y donde los programas sociales son vistos como el principal logro del gobierno, nos dice que "no resulta extraño ...el trascendido palaciego de que las personas que han ocupado y ocupan cargos vinculados a estas labores (Trive­lli, Rubio, etc.) ya han sido nominadas a formar parte de la lista congresal del nacionalismo."  Corremos traslado del dato a las ex ministras.